martes, 12 de octubre de 2010

Plus-que-parfait

Para practicar el plus-que-parfait el tema de la clase son los recuerdos. Me cuesta trabajo. Busco uno que no me vaya a poner triste. Mi nueva compañera búlgara, habla de los recuerdos que traen los olores y los sabores. Yo miro su diccionario en alfabeto cirílico y me da estrés de sólo pensar lo difícil que debe ser para ella aprender este “bendito” idioma. Mi turno. Hace dos días estaba oyendo “Asesíname” de Charly García. Me agarro de ahí y digo que la música es como la banda sonora de determinadas épocas de la vida. Cuento como con mi hermano comprábamos los casetes piratas a los hippies. Las voces que se oían como cantando por entre un tubo. Un universo sin ecualizador donde todo sonaba a la misma altura. También hablo de los primeros cds no-piratas que tuvimos. De la magia de poder oír las versiones limpias. De la felicidad vertiginosa de los conciertos de los músicos argentinos que siempre nos gustaron tanto. Aclaro que éramos un poco “mamertos” y explico la expresión. Ellas se ríen y me preguntan si estoy segura de no seguir siéndolo. Yo replico que el ejercicio dice que use el plus-que-parfait. Ellas responden que el ejercicio no autoriza a decir mentiras. Siguen riéndose. No me queda más que reírme con ellas.

Pero el verdadero recuerdo es otro. Alguna vez vi un reportaje sobre Charly García en el que él mismo contaba como resistía los embates de la dictadura haciéndose el loco. También de sus problemas de droga, de su hijo, de la pintura, de cómo veía que todos sus amigos debían irse a refugiar a otros países para conservar su vida, y de cómo los esperaba. De la gente que lo odia y de la que lo ama hasta el delirio. Mientras voy en el carro repasando esta historia, me rio de ver que hasta mis recuerdos son mamertos. Para curarme la crisis de existencialismo me compro una revista de chismes y la leo mientras espero que sea la hora de recoger al niño de la guardería. El problema de la distancia es que hace que los recuerdos se vuelvan mas-que-perfectos (plus-que-parfait).

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